Este es sólo el principio: La ley de Economía Sostenible, aprobada por el Consejo de Ministros, tiene que seguir el camino inevitable de su tramitación parlamentaria, de la redacción del reglamento, etc., etc…
¡Ahora es cuando llega la hora de la verdad! ¡Ahora es cuando la Ley empezará a tomar forma definitiva!
¡Es el momento de las enmiendas, de que los “representantes del pueblo”, trabajen, se reúnan en comisiones, oigan los informes de juristas, reciban la «presión» de los lobbys, de los internautas, de los medios de comunicación, de los que se dicen expertos, de los menos expertos…!
Y, finalmente, después de negociar y pactar los unos con los otros, Sus Señorías tendrán que VOTAR y dar así el espaldarazo definitivo a lo que será la Ley, con todo lo que incluye.
Ha empezado la cuenta atrás.
En 1992, las empresas españolas, sufrimos el impacto de la LORTAD (Ley Orgánica de Regulación del Tratamiento Automatizado de los Datos de Carácter Personal).
Fue la trasposición MÁS DURA de una Directiva que afectaba a todos los miembros de la Unión.
En España, aquella Ley contenía como un mensaje subliminal de «os vais a enterar». ¡Y vaya si nos enteramos!
La Ley venía a “castigar» la utilización de listas ilegales y los envíos de publicidad a direcciones obtenidas por medios fraudulentos. Sí es cierto que, en aquel momento, entre otros posibles desmanes, se «comerciaba» con el Censo, sólo asequible a los Partidos Políticos…
¿Cuáles fueron las consecuencias? Pues que pagaron justos por pecadores, imponiéndose sanciones tremendas, por ejemplo, por errores en una dirección o cosas parecidas.
Cualquier sobre con tu nombre era sospechoso. -«¿De dónde habrán sacado mi dirección? ¿Por qué me envían a mi esto? ¿Quién les ha dado mis datos? ¿Qué saben de mí?”…
¡Daba miedo recibir una carta…! ¡Y daba miedo utilizar una lista por muy segura que pareciera…!
La Fecemd ha trabajado durante dieciocho años (¡y sigue trabajando!) para hacer PREDECIBLE a las empresas lo que desde la Agencia de Protección de datos y la Audiencia Nacional resultaba IMPREDECIBLE. Reuniones, propuestas, encuentros… incluso con TODOS los grupos parlamentarios.
Con la Ley “Sinde”, siento en el estómago la misma sensación angustiosa de todos estos años amenazados por la LORTAD.
Si lo que pretendía la LORTAD era un «escarmiento total», afirmo que lo consiguió.
Ahora hay otra revolución en marcha y es la que va a afectar al SPAM telefónico. ¡Acaba de empezar! En su desarrollo también ha estado presente la Fecemd.
¿Qué va a ocurrir con la nueva Ley de Economía Sostenible?
Ha llegado el momento de comenzar, una vez más, el trabajo SILENCIOSO Y PERSISTENTE de Fecemd, que, como dice el artículo de Ramón Muñoz en “El País” del sábado 20 de marzo, será «LA NUEVA PATRONAL QUE DEFENDERÁ LOS INTERESES DE LAS EMPRESAS EN INTERNET».
Lo que hay que defender es lo LEGÍTIMO, lo JUSTO, lo PRUDENTE, lo RAZONABLE, lo que TIENE SENTIDO, lo que INTERESA a EMPRESAS Y USUARIOS, lo que es NATURAL, lo que la DEMOCRACIA exige, lo que los DERECHOS obligan, lo que INTERNET tiene que ser para TODOS…
Lo que digamos en este y en otros blogs tiene poca o ninguna relevancia. Ahora hay que hacer el trabajo que hay que hacer pero sin ruido…
ES la hora del POCO RUIDO Y MUCHAS NUECES.